Este estilo de mobiliario francés representa la majestad del Rey Luis XIV. El Taller Real de Muebles de la Corona (Manufacture Royale des Meubles de la Courone) creado en 1677, fue dirigido en este periodo por Jean-Charles Lebrun, quien será sucedido por el conocido Jean Berain. En estos talleres se elaborarán muebles en materiales de alta calidad y diseños hasta entonces inconcebibles.
Los muebles más característicos de este periodo son: armarios y bibliotecas. La cómoda aparece a partir de 1708 y será el mueble más fabricado. La importancia de la jerarquización de los asientos es notable y dará lugar a una amplia variedad de los mismos, desde los sillones de tapicería capitoné a los taburetes. Las patas adquieren formas en balaustre y garras de animal principalmente. Y de Italia son traídos cabinets de piedras duras que inspiran los modelos franceses de martquetería de maderas exóticas.
En cuanto a temas decorativos son característicos el emblema del sol, muy frecuente ya que representa al propio Luis XIV, personajes mitológicos, dioses, sátiros, faunos, bacos, ninfas, y flores de lis.
La ornamentación en bronce es muy importante en este periodo, la encontramos en muebles, lámparas y espejos. La talla en alto relieve, la marquetería de maderas exóticas y las incrustaciones de hueso dan lugar al muebles de gran riqueza decorativa.
Las maderas más empleadas son las de ébano, sapín y las frutales. Otros materiales empleados son el cobre, la plata, el estaño, el latón, el hueso, el carey y el bronce.
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